Las Dominicas de Lerma son religiosas contemplativas que viven en ese pequeño pueblo de Burgos (España). Cada día envían lo que ellas llaman: un «reto del Amor«, que es una reflexión espiritual dirigida sobre todo a los seglares.
Estas monjas de clausura suelen recibir muchas preguntas e inquietudes, y entre ellas está el llamado «asunto Halloween«, que en los últimos años ha disparado la preocupación de muchos fieles que ven en esta fiesta pagana una connotación anticristiano..
¿Que es esta fiesta de Halloween?
Las Dominicas de Lerma responden a lo que muchas personas les preguntan: «¿Debemos o podemos celebrar esta fiesta?». Y esta es la respuesta de las religiosas:
«Primero habría que preguntarse: ¿Pero en realidad que es esta fiesta de Halloween? ¿Quien se esconde detrás de ella?
»1. NO es una actividad cristiana. Ninguna iglesia de denominación cristiana celebra esta fecha. Ni católicos, ni evangélicos, celebramos y nunca celebraremos una noche dedicada a la exaltación de la brujería en ninguna de sus formas.
»2. Va contra las enseñanzas de Jesús. Jesús está en contra de la brujería en todas sus formas: espiritismo, hechicería, adivinación, lectura de cartas, horóscopos, astrología y tantas máscaras con que se encubre la maldad. Estas han sido declaradas enemigas de la Palabra de Dios desde tiempos muy remotos y van contra todas las enseñanzas de nuestro Señor, quien dice claramente que «el que no está conmigo está contra mí». Hay innumerables referencias bíblicas donde se condena el uso de toda estas clases de mal.
»3. Sirve para rendir culto a satanás. Aunque en apariencia es una actividad recreativa y muy llamativa, sobre todo para los niños, su verdadero significado sigue oculto a nuestros ojos. En muchos países, incluyendo el nuestro, los grupos satánicos usan esa noche para un «culto» especial dedicado a satanás y en muchos países alrededor del mundo, se hacen sacrificios humanos, sobre todo de niños que han sido secuestrados de sus hogares y que son ofrecidos como víctimas inocentes en una noche de lujuria, drogas, alcohol y toda clase de desenfrenos, en las llamadas «misas negras».
»4. Se opone al primer mandamiento. Este tipo de actividades, ni exalta el nombre de Jesús, ni tiene nada que ver con su Padre Celestial y mucho menos con el Santo Espíritu del Dios Altísimo. Por lo tanto, va en contraposición al primer mandamiento de amar a Dios con toda nuestra alma, nuestra mente, nuestro corazón, con todas nuestras fuerzas, en fin con todo nuestro ser.
»5. Participar es olvidarse de Dios. Participar quiere decir «ser parte de»: si tu participas estsá siendo parte de esta tremenda responsabilidad espiritual: No sólo se está alejando u olvidando de la adoración al Dios Eterno e Inmortal, sino que está siendo parte de una actividad que glorifica a las brujas y a su padre satanás.
»6. Contamina y esclaviza a nuestros niños. No hay magia blanca y magia negra, no hay brujas buenas y brujas malas. Toda la actividad demoníaca se disfraza y se oculta para ganar adeptos y así muchas veces «vestimos» a nuestros niñitos como «brujitas» y «diablitos». Jesús dijo: «Dejad que los niños vengan a mí y NO SE LO IMPIDÁIS, porque de los tales es el Reino de los Cielos». Jesús necesita a sus niños libres de toda clase de máscaras y limpios de toda contaminación.