Reto de amor

Hola buenos días hoy nos lleva Joane ( Julia) al Señor.
Buenos días, hoy el reto del Amor es caminar, avanzar, no dejar que tu pasado te aplaste. El monasterio está en un pueblo, es cierto que no es de los pequeños pero el sonido de fondo nada tiene que ver con el tráfico o el bullicio de la gran ciudad. Muchos días estamos en la capilla y son unos simples perros ladrando rompen el silencio. Al principio descentraban un poco, había momentos en los que daban ganas de gritar “¡qué se los lleven de una vez!” se tornaba molesto y lo peor es que no se podía hacer nada por callarlos, no estaba en mi mano ¿y ahora? Siguen ladrando, a veces no los oigo por que estoy acostumbrada y cuando los oigo y siento que me empiezan a enfadar los quito de mi centro de atención y vuelvo a lo que estaba: A mirar al Señor. Hoy pienso en los perros, pienso en mi pasado, en tu pasado. Todos hemos tomado decisiones, vivido experiencias, tenido circunstancias en la vida que en ciertos momentos nos “ladran” con fuerza haciéndonos revivir sentimientos dolorosos, de culpabilidad en nuestro interior basados en un pasado que no podemos cambiar. Ladridos que suenan a: “si no hubiese hecho esto”, “en estos momentos el/ella estaría…”, “si hubiese tomado otra decisión”, “yo tuve la culpa”… Lo peor del pasado es que es como un perro pero no un perro que está fuera del monasterio, un perro que nos persigue, un perro al que no podemos callar, un perro que ataca en los momentos de soledad, en los momentos en que vemos algo que nos hace referencia a una vivencia, a una herida del pasado. Tenemos varias opciones: la primera es cogerlo en brazos, lamentarlo, “es nuestra cruz”, dejar que nos muerda todo lo que quiera y sufrir cada día como si lo mereciésemos.Lasegunda es correr, correr muy rápido para que el perro no nos alcance, no pensar, endurecer el corazón, construir un muro para no sentir,hacer como que el perro no existe pero en realidad ahí sigue. La tercera es parar, darnos la vuelta, mirar de frente al perro, mirar aquello que has vivido, aquello que tanto te pesa, pero no lo cojas por que tú no puedes con ello,no corras por que te seguirá persiguiendo. Hoy vamos a mirar a Cristo y todos los ladridos que te atormentan, que te pesan de tu pasado entregaselos a El, tu no puedes con ellos pero El si y quiere llevarlos por ti. No te digo que el “perro”vaya a desaparecer, caminara contigo pero…no te morderá, no te destruirá por dentro por que tu ya no cargarás con ello y si en un momento dado vuelven a aparecer las garras y los dientes…¡no lo cojas! Vuelve a mirar al Señor, vuelve a entregarle lo que sientes y no le des vueltas. Hoy el reto del Amor es no dejar que tu pasado te aplaste. Hoy tienes la oportunidad de coger el camino de la Vida ¿qué vamos a hacer con el perro? ¡Adelante, Vive, merece la pena! No estás sólo, Cristo carga con lo que tu le quieras entregar.

¡VIVE DE CRISTO!

 

Evangelio del día

Tened valor: yo he vencido al mundo

Lectura del santo evangelio según san Juan 16, 29-33
En aquel tiempo, dijeron los discípulos a Jesús:
– «Ahora sí que hablas claro y no usas comparaciones. Ahora vemos que lo sabes todo y no necesitas que te pregunten; por ello creemos que saliste de Dios.»
Les contestó Jesús:
– ¿Ahora creéis? Pues mirad: está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que os disperséis cada cual por su lado y a mí me dejéis solo. Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo.»

Palabra del Señor.

Tú preguntas…

Papa Francisco: «Todos hemos experimentado dudas en el camino de la fe. También yo»

«Nuestra fe necesita el apoyo de los demás, especialmente en los momentos difíciles»

 

Por eso en esta página podrás plantear tus dudas o preguntas.
Manda tu duda a la dirección: santiagoapostcr@gmail.com.

Tu pregunta puede ayudar a  otros, si tu quieres(sólo si tu quieres) la publicaremos en la página web, pues podríamos ayudar a muchos hermanos que a lo mejor también se la plantearon.

 

Vida Parroquial

Los fieles perseveraban en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en la fracción del pan y en las oraciones (Hch 2,42).

Bautizos

Segundos y Terceros Domingos de mes en la misa de 13:00 h.

Bodas

Viernes: 18:30 h

Sábado: 13:00 h y 18:30 h

Domingo:18:30 h

 

 

Pastoral Universitaria

Reunión 05/Mayo/2014

El lunes pasado en la pastoral seguimos viendo cada una de las partes del Credo, esta vez tocaba “La comunión de los santos” y “El perdón de los pecados”. Como siempre, Don Manuel nos propuso las dos preguntas siguientes:

1-      ¿Cuál es el principal santo de tu devoción?

2-      ¿Te han perdonado alguna vez?

Estuvimos comentando los santos a los que más devoción tenía cada uno y propusimos que sería bueno leer la vida de los santos para tomar ejemplo de ellos. Se preguntó si nos gustaría conocer a alguien concreto cuando vayamos al cielo,  ya que no estaría mal tener “amigos” en el cielo. Destacamos que María es fundamental en la comunión de los santos y tenemos que fijarnos de ella para aprender a sonreír, puesto que una sonrisa sincera es la expresión externa de lo más hondo del alma.

En una segunda parte, estuvimos hablando sobre “El perdón de los pecados”. La primera reflexión es ver qué es el pecado. ¿Creemos en la existencia del pecado? ¿Si Dios no existiera, existiría el pecado? La respuesta a estas preguntas es que sí que existe el pecado (aparece en Gn 3, en la 1º carta de San Juan 8-10). Si Dios no existiera, quizá no existiría el pecado. El pecado es no cumplir la voluntad de Dios en nuestra vida. El pecado depende de la intención (de la voluntad), si lo si hacemos sin libertad no es pecado. Si nos vemos restringidos a realizar un pecado, siempre tenemos que elegir el que menos mal haga. ¿Depende de la conciencia? El pecado sea consciente o no, al ser un mal objetivo, es pecado, por tanto hay que educar la conciencia.

Hay distintos niveles de pecado: por ejemplo, no sería lo mismo masturbarse que acostarse con alguien, obviamente, masturbarse es menos grave, aunque ambas cosas no dejan de ser pecado; otro ejemplo sería pegar a alguien, que es distinto que matar a alguien, pero otra vez, ambas cosas son pecado. El pecado es todo aquello que no te realiza como persona. El pecado es ir en contra del amor, romper la comunión con tus hermanos y con Dios. Por tanto, como Dios existe y la libertad también, existe el pecado. Somos responsables y libres.

¿Es posible el perdón? El perdón es amar a la persona por encima de la ofensa. El perdón es hacer un esfuerzo de amor y, reconociendo el mal que se ha hecho, no justificarlo, y restablecer la relación con la persona. El perdón de Dios siempre precede al arrepentimiento, Dios te perdona y luego te arrepientes. En el caso de las personas, en ciertos casos no es así. El perdón de Dios sana. ¿Hay que perdonarlo todo? Como dijo Jesús a San Pedro: “No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.”

¿Y la Iglesia puede perdonar? ¿Y nosotros podemos perdonar a los demás? Lo veremos la semana que viene.

Como recomendación leer estos evangelios que tratan también sobre el perdón:

Mc 2: http://www.vatican.va/archive/ESL0506/__PV4.HTM

Mt 1, 21: http://www.vatican.va/archive/ESL0506/__PUB.HTM

1º Cor, 2-3: http://www.vatican.va/archive/ESL0506/__PYE.HTM